¿Y ahora que hago?

El Overbooking, los vuelos cancelados, la pérdida de maletas y los retrasos son las complicaciones clásicas de cada verano en todos los aeropuertos del mundo. Por suerte, no ocurren tan a menudo como parece, pero si te toca, te toca y es toda una faena. En ocasiones las cancelaciones y los retrasos vienen motivadas por causas ajenas a la compañía: espacio aéreo saturado, infraestructuras deficitarias de los aeropuertos, pérdida de conexiones por parte de los pasajeros, problemas de seguridad... etc.

¿Que hacer en estos casos?

Es importante tener en cuenta:

La tarjeta de embarque es la que garantiza 100% un asiento en el avión. Así que para evitar overbooking lo mejor es facturar de los primeros. Algunas compañías aéreas permiten sacar la tarjeta de embarque por internet. No te confíes por tener el billete de avión.

Las reclamaciones hay que hacerlas en los mostradores de las compañías y por escrito. No sirve de nada liarse a gritos con el personal. Si quieres su cooperación, es mejor ser firmes y educados.

En casos de overbooking, la compañía buscará voluntarios para quedarse en tierra a cambio de una compensación económica. Si no es suficiente con esta medida, al resto de pasajeros afectados se les debe dar vuelos alternativos o compensaciones económicas.

Un retraso puede quedarse en una demora de horas o en la perdida del enlace con otro vuelo. La compensación variará dependiendo de si los dos tramos eran la misma compañía o diferentes.

Cuando un retraso conlleva gastos adicionales de noches de hotel o comidas, hay que guardar todos los tickets para luego hacer la reclamación de los costes a la compañía aérea.